Autor: Kerstin Gier.
Año de Publicación: 2010.
No estoy listo para que dejes de ser mi problema
-Park
Daemon esta decidido a demostrar que lo que siente por mí es más que un producto de nuestra conexión extraña. Lo he rechazado a pesar de que esta más caliente que frío estos días. Pero a pesar de todo sentido común, me estoy enamorando de él. Duro.
Nuestros problemas de pareja no son nuestro problema mayor... El Departamento De Defensa esta aquí. Si alguna vez se enteran de lo que Daemon puede hacer y que estamos vinculados, estoy muerta. Al igual que él. Y cuando un chico nuevo se presenta en la escuela con un secreto propio, las cosas se complican rápidamente. Necesito escoger entre mis propios instintos y los de Daemon. Pero después todo cambia...
He visto a alguien que no debería estar vivo. Daemon nunca parará de buscar hasta llegar a la verdad. ¿Qué sucedió con su hermano? ¿Quién lo traicionó? ¿Y que quiere la DOD de ellos- de mi? Nadie es quién parece. Y no todos sobrevivirán las mentiras.
Daemon seguía siendo un autentico sabelotodo. Y si, esa sonrisa arrogante todavía me irritaba. Pero lo amaba. Y aquel cretino también me amaba a mí.
Cuando nos mudamos a West Virginia, justo antes del último curso de instituto, creía que me esperaba una vida aburrida, en la que ni siquiera tendría internet para actualizar mi blog literario.Entonces conocí a mi vecino, Daemon. Alto, guapo, con unos ojos verdes impresionantes… y también insufrible, arrogante y malcriado.Pero eso no es todo. Cuando un desconocido me atacó, Daemon congeló literalmente el tiempo y me confesó que no es de nuestro planeta.Sí, lo habéis leído bien. Mi vecino es un alienígena sexy e inaguantable. Resulta que, además, él y su hermana tienen una galaxia de enemigos que quieren robar sus poderes. Y, por si fuera poco, ahora mi vida corre peligro por el simple hecho de vivir junto a ellos.
- Seguro que hasta sueñas conmigo - Bajó la vista hacia mis labios y sentí que se despegaban - Seguro que escribes mi nombre en tus libretas, una y otra vez, rodeado por un corazoncito.
Me reí.
- En tus sueños, Daemon. Eres la última persona a la que...
Daemon me besó