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15 diciembre 2025

¿Vale la pena leer Go Luck Yourself, por Sara Raasch?

Go Luck Yourself
Por Sara Raasch ‧ 2025
ROYALS AND ROMANCE
1. The Nightmare Before Kissmas | 2. GO LUCK YOURSELF

REPRESENTACIÓN: Protagonistas LGBTQAI+


Someone has been stealing Christmas’s joy, and there’s only one clue to the culprit—a single shamrock.
With Coal busy restructuring Christmas—and their dad now having a full midlife crisis in the Caribbean—Kris volunteers to investigate St. Patrick’s Day. His cover: an ambassador from Christmas to foster goodwill. What could go wrong?
Everything, it seems. Because Prince Lochlann Patrick, Crown Prince of St. Patrick’s Day, happens to be the mysterious student that Kris has been in a small war with at Cambridge. They attempt to play nice for the tabloids, but Kris can’t get through one conversation without wanting to smash Loch’s face in—he’s infuriating, stubborn, loud, obstinate, hot—
Wait—hot?
Kris might be in some trouble. Especially when it turns out that the mystery behind Christmas’s stolen magic isn’t as simple as an outright theft. But why would a Holiday that Christmas has never had contact with, one that’s always been the very basis of carefree, want to steal joy? Can a spare prince even hope to unravel all this, or will Kris lose something way more valuable than his Holiday’s resources—like his heart?
En el 2024 se hizo más o menos popular una historia que recordaba mucho a Red, White and Royal Blue, excepto que los protagonistas eran el príncipe de la navidad y el príncipe de Halloween, esa obra fue el primer libro de lo que en este año se convirtió en una serie, al salir la historia de uno de los personajes secundarios, pero más queridos de esa obra, Kris, el otro príncipe de navidad, quien ahora estaría en su propia aventura para salvar la navidad, lo que implica enamorarse del príncipe heredero de San Patricio. Con una media de 4.31 estrellas y más de 10.000 personas opinando sobre esta historia, podría decirse que logró su objetivo como secuela, teniendo una recepción increíble por parte del público al que está dirigido.
Este libro contiene los siguientes posibles triggers: ataques de pánico, abuso de niños, padres abusivos, familiares abusivos, uso de alcohol.

Mi opinión corta, en cuanto lo terminé, fue algo así: entre más pienso en la historia, más me disgusta.
    Pero aquí vengo a desglosar. Así que, por qué me disgusta.

LA ESCENCIA DE LOS PERSONAJES ES MUY DISTINTA
    En el primer libro, Kris se presentó como el personaje sensato del dúo de hermanos.
    Seguía las reglas con rigor porque su objetivo no era solo cumplirlas, sino demostrar que podía ser un buen hermano menor, alguien que no pusiera en riesgo la reputación de su festividad, sobre todo considerando que el hermano mayor —heredero y todo— sí solía causar problemas. Kris era el contraste perfecto: prudente, consciente en el uso de su magia y, más que nada, un embajador impecable. Sabía hablar, sabía comportarse, sabía representar.
    Y, claro, todos entendíamos que detrás de esa fachada había represión.
    Sabíamos que le costaba mostrarse tal cual era, que cargaba expectativas ajenas y que había partes de él mismo que prefería esconder. Pero, aun así, su esencia seguía siendo la de un chico dulce, un joven que adoraba fastidiar cariñosamente a su hermano mayor y que jamás habría hecho algo que dañara su festividad.
    Pero en esta nueva entrega, es como si alguien hubiera cambiado las etiquetas de los personajes.
Kris y su hermano parecen intercambiar papeles. Todo lo que antes hacía Coal —ser impulsivo, frívolo con la magia, imprudente al hablar— ahora lo hace Kris, incluso en situaciones donde su rol como embajador debería haberlo frenado. Y vamos, eso molesta, porque no es un crecimiento, ni una crisis (aunque sí pasa por varias crisis el niño), ni un arco de personaje: simplemente parece otro personaje usando el mismo nombre.

LOS NUEVOS PERSONAJES NO DAN LA TALLA
    Algo que disfruté muchísimo del primer libro fue la dinámica entre Coal y Hex. Eran polos opuestos en el mejor sentido: chocaban, se complementaban, tenían química narrativa y emocional. Su interacción era graciosa, tierna, y generaba un interés genuino por saber más de ellos.
    Eran personajes diferentes, sí, pero coherentes, con motivaciones claras y personalidades definidas. Se sentían vivos.
    En contraste, los nuevos personajes de esta entrega no logran sostener el mismo nivel, especialmente Lochlann, que en teoría debería ser una pieza clave de la historia al fungir como interés amoroso de Kris.
    Lochlann no resulta un personaje atrapante. No se siente bien desarrollado ni particularmente distinto de otros secundarios de fantasía romántica. Más que aportar capas o complejidad, sus actitudes parecen limitarse a igualar la imprudencia de Kris, entrar de lleno en un tropo de “del odio al amor” sin suficiente construcción, y manejar “todo bajo cuerda” en su festividad para demostrar, muy de vez en cuando, que no es completamente un imbécil.
    Las hermanas de Lochlann son bastante irrelevantes en la historia en sí misma, más allá de puntos de apoyo ocasionales, y un pequeño indicio de que una de ellas podría tener una relación con Iris, la mejor amiga de Kris y Coal, por lo que no descarto que tengamos alguna vez un tercer libro en la serie para desarrollarlo más allá de una noche de fiesta.

EL ABUSO NO ES NORMALIZADO, PERO TAMPOCO CASTIGADO
    Esta serie aborda de forma constante —y bastante explícita— las dinámicas familiares disfuncionales. El problema no es que lo haga, sino qué decide hacer con ellas.
    La madre de Kris y Coal los abandona cuando apenas eran niños. Años después, mantiene contacto solo para victimizarse: se queja de que sus hijos no la buscan, de que no forman parte de su vida, ignorando por completo que ella era la adulta responsable y que fue quien los dejó atrás. La obra expone claramente esta actitud como dañina, pero nunca la confronta de forma real ni le asigna consecuencias.
    En el libro anterior, el padre de ambos es amonestado en su rol como Rey de la Navidad cuando se revela su carácter tiránico. Sin embargo, en esta entrega, tras años de abuso verbal y psicológico hacia sus hijos, además de sus comportamientos nocivos hacia otras festividades, su resolución es marcharse en busca de su exesposa, abandonándolos una vez más. No hay reparación, no hay rendición de cuentas ni una reflexión profunda sobre el daño causado, ni siquiera alguien ajeno a sus hijos hablando de lo mal que estuvieron sus acciones. Simplemente desaparece, como buen político corrupto, y dicha desaparición funciona más como una evasión que como un castigo, pues él no lamenta nada de lo ocurrido. 

“I altered my whole being into shapes that fit voids in everyone else’s lives so they’d stay, so my life would look perfect, so I wouldn’t be alone again. But I never asked myself what shape I wanted to take.”
    Algo similar ocurre con el tío de Lochlann, el antagonista de esta historia y el único familiar adulto que Loch y sus hermanas tienen. Él se aprovecha de la festividad para absorber toda la magia para sí mismo, descuida por completo su función de mantenerla próspera y, además, ejerce abuso psicológico constante sobre ellos. A pesar de la gravedad de sus acciones, las consecuencias que enfrenta son mínimas o inexistentes, al menos en proporción al daño infligido. 
    Y aquí está el punto central: el abuso no se presenta como algo aceptable, pero tampoco se castiga
    Como lectores, reconocemos que estas conductas son dañinas, incluso traumáticas, pero se queda a medio camino. No hay justicia narrativa, ni reparación emocional, ni un cierre que valide el sufrimiento de los personajes

Y BUENO, EL TÍO DE LOCHLANN TAMPOCO ES UN GRAN VILLANO, ¿SABEN?
    El antagonista de esta historia tampoco logra destacar.
    Su problema principal es simple pero grave: carece de una motivación real. Es malo porque sí, porque puede. Trata mal a sus sobrinos porque tiene poder sobre ellos, no porque exista un conflicto interno, una ideología o siquiera una ambición bien planteada que lo respalde.
    En teoría, su objetivo es reinar sobre la festividad de San Patricio. Sin embargo, sus acciones contradicen constantemente ese supuesto deseo. No hace nada por mantener viva la festividad, no organiza actividades, no procura la felicidad de los humanos —factor clave para que la magia de estas celebraciones exista dentro del sistema de magia del mundo— y, aun así, utiliza la suerte que genera la festividad únicamente para invertirla en sus negocios personales y volverse millonario.
    Esto lo vuelve no solo un villano plano, sino uno incoherente con las reglas del universo. Si la magia de las festividades depende de la alegría humana, resulta absurdo que un antagonista que desea conservar el poder ignore por completo el motor que lo sostiene.
    De hecho, desde una lógica interna, darle el control a Lochlann desde el inicio habría sido la mejor decisión posible. Lochlann habría mantenido la festividad próspera, asegurando un flujo constante de magia, y aun así le habría permitido a su tío quedarse con una parte para invertirla en sus negocios, si eso era lo que realmente quería. Era una solución sencilla, funcional y beneficiosa incluso para el propio antagonista.
    Pero no.
    Elige tomar decisiones torpes y cuestionables, no porque sean estratégicas o trágicas, sino porque la historia lo necesita así. Y, al final, todo se resume a lo mismo: puede hacer lo que quiera porque nunca enfrenta consecuencias reales.

 OTRO AMOR A PRIMERA VISTA DISFRAZADO DEL TROPO DE RIVALES A AMANTES
    Kris y Lochlann se conocen en circunstancias bastante interesantes. 
    En la universidad, Kris reserva un salón de estudio. Pero, al llegar, encuentra que está ocupado por Lochlann, a quien le pide que se retire con amabilidad. Este decide ignorarlo, por lo que Kris decide utilizar la magia de la Navidad para darle una lección. Resultado desproporcionado: Lo humilla públicamente sin saber que es el príncipe de San Patricio. 
    Esta decisión impulsiva por parte de Kris, hace que las personas se cuestionen la capacidad de Loch para ser el heredero de su festividad, como si las decisiones de otros tuvieran que ver con su competencia personal.
     Y, aun así, desde ese primer momento, la tensión no es de enemistad real, sino de atracción evidente. La mitad de las pullas que se lanzan funcionan solo para subrayar lo atractivos que se encuentran mutuamente.
    Pero nos tenemos que creer que ellos se odian, eh.
    Su relación, en todo caso, no me parece convincente. 
    Lochlann es antipático la mayor parte del tiempo, rebaja a Kris con sus palabras y lo hace sentir humillado de forma constante. La historia intenta justificarlo al decir que es irlandés y esa es su forma de coquetear. Pero, en lo personal, ser un imbécil, sin importar tu país o tus traumas, nunca me ha parecido una buena forma de demostrar interés romántico
    Kris no está en una mejor posición, pues, aunque se arrepiente de la broma de mal gusto por solo un cuarto de estudio, su orgullo herido le lleva a tomar decisiones muy cuestionables en cuanto a cómo se comporta. De nuevo, no es una decisión que ayude a empatizar con la pareja.
    Decir que toda la rivalidad al amor sucede en el transcurso de una semana no es exagerar. Es el tiempo real de la novela. Y, lamentablemente, no es lo que busco en un libro cuyo único tema para ofrecerme es el romance. Le falta desarrollo a la relación, le falta alma, tensión real y profundidad emocional.

“You aren’t an awakening. You’re the whole dawn. And I can’t believe I ever thought I’d seen the sun before you.”
LA MAGIA DE REALEZA SE ROMPE DE FORMA CONSTANTE
    Hagamos un énfasis especial en que estos personajes son príncipes de festividades. Desconocidos para el mundo mortal, sí. Pero todavía con una reputación para mantener y prensa que les sigue de forma constante para las revistas de chismes en el sistema mágico de su mundo
    Pero, por alguna razón, son las personas menos dignas que encuentro.
    Podría decirse que tiene más gracia y decoro un NPC. 
    Kris se presenta a las actividades oficiales como embajador de la Navidad con camisetas con frases de doble sentido. Es más, la de la portada del libro dice "kiss my snowballs". Y sí, sale así, sin ironías ni consecuencias. 
    Esto resulta aún más absurdo cuando el propio texto establece que Kris cuenta con un equipo encargado de diseñar su imagen pública y escoger su vestuario para representar adecuadamente a su festividad. Se supone que hay protocolo, criterio y estrategia detrás de cada aparición. Pero, por alguna razón, ese equipo decide que la mejor opción no es una corbata con copos de nieve, ni un suéter elegante, ni algún símbolo festivo… sino camisetas sugestivas.
    Decisiones narrativas, entonces. Se pone en duda la capacidad de Lochlann debido a una broma ajena a sus decisiones, que no hace referencia a su personalidad o a su competencia como heredero; pero al mismo tiempo nadie crítica las elecciones estéticas de Kris, aunque las decisiones sobre la ropa sí que tienen que ver con gustos y personalidad. Interesante. No en el buen sentido.


Para resumir lo ya dicho, repito lo del inicio: entre más pienso en esta historia, más me disgusta.
    Los personajes pierden coherencia, y los nuevos no logran compensar esa pérdida, en especial Lochlann, cuyo desarrollo y romance se apoyan casi por completo en tropos poco trabajados.
    El abuso familiar se expone, pero nunca se confronta ni se castiga. El villano carece de motivación real y actúa en contradicción con las reglas del propio mundo mágico, y las consecuencias se aplican de forma selectiva según convenga a la trama.
    A esto se suma un romance apresurado y poco convincente, una representación de la realeza que rompe constantemente su propia solemnidad y decisiones narrativas que castigan a personajes por actos ajenos mientras ignoran responsabilidades evidentes.
Por estas razones, no podría decir que recomiende Go Luck Yourself.


Encuéntrame:

24 mayo 2025

Duskwalker Brides (1-8), por Opal Reyne

     Hace un par de años empecé con la saga de las Duskwalker Brides, una serie de libros de monster romance, en donde la cualidad encantadora de los protagonistas masculinos es ser una mezcla variopinta de criaturas con el cráneo de un animal por cabeza. Estos ganan fuerza al alimentarse de demonios, las características de su cuerpo las obtienen de los primeros animales que consumen, y la inteligencia, la adquieren de los humanos, a los cuales también se deben comer. Otra característica especial, es que están diseñados para ser consumidores de almas, con un hambre eterna hasta que consiguen una novia que les da la suya por voluntad propia, momento en que esta ansiedad por comida finalmente se sacia. ¿El problema? Al estar guiados por sus instintos más básicos, en donde la rabia o el olor de la sangre los envía en un frenesí de consumo, tanto los demonios como los humanos los consideran demasiado peligrosos para siquiera lograr tener una conversación con ellos.

    Con esta premisa, a lo largo de ocho libros iremos conociendo a los distintos Duskwalkers, con más o menos humanidad, y la forma en la que logran conseguir el amor de maneras inesperadas. Todos los libros son narrados a dos voces, por lo que conocemos tanto la perspectiva del monstruo, como la del humano. 

Duskwalker Brides   

 por Opal Reyne  2022 al 2024

Fantasía | Paranormal | Romance


Contiene spoilers de todos los libros de la serie

En este mundo apocalíptico, los humanos vivían de forma tranquila hasta que, un día, llegaron los demonios a través de un portal. Los demonios, guiados por sus instintos de depredadores, arrasaron con todo a su paso, obligando a los humanos a refugiarse, retrasando con ello su avance tecnológico. Estos, siendo intolerantes a la luz del sol, se refugiaron en un gran velo de sombras, creado por Weldir, un semidiós, padre de lo que posteriormente serían los Duskwalkers, saliendo a cazar solo en las noches y en el cobijo de la sombra de los grandes bosques. Las vías marítimas fueron reducidas a nada, por culpa de las criaturas monstruosas bajo el agua. Así, los protagonistas humanos crecieron en un mundo bastante medieval, donde las supersticiones eran el pan de cada día y el papel de la mujer siempre fue tenido a menos.

★★★★☆
    Así conocemos a la primera protagonista, Reia, una mujer que experimenta poco miedo y que, gracias a saber controlar esa característica, fue superviviente de un ataque de demonios que arrasó con el resto de su familia. Vivió aislada toda su vida, tratada como un mal augurio por todos en su ciudad y, una vez que cumplió la edad suficiente, fue ofrecida como sacrificio a Orpheus, el primer Duskwalker que conocemos. Orpheus es un Mavka con bastante humanidad, que desde hace mucho tiempo está en busca de su novia. Cada diez años viaja a esta ciudad con la intención de obtener una humana que quiera darle su alma. A cambio, el diseña un hechizo de protección para que los demonios no puedan entrar al lugar. Aunque su intención es buena, el miedo de las chicas que le son dadas generalmente termina haciendo que se las coma incluso antes de llegar a su casa. Las pocas que logran sobrevivir un tiempo, son secuestradas por Jabez, el rey demonio, quien tiene bastante animadversión por Orpheus y haría cualquier cosa por verlo sufrir. Ambos son almas bastante dolidas, con pasados tristes en donde son incomprendidos y culpados por acciones que ni siquiera tenían la madurez para entender, lo que los lleva a ser una pareja excelente.

    Para el segundo libro, la protagonista es Delora, una mujer que, engañada por su esposo con la hija del alcalde de su aldea, decide asesinarlos a ambos al encontrarlos en pleno acto. Esto, hace que los ciudadanos se decanten por arrojarla al Velo, donde no le espera más que una muerte segura. Sin embargo, por obra de la madre de los Duskwalkers, Delora aterriza sobre Magnar (mi favorito), un Mavka con cabeza de zorro, que a pesar de tener muy poca humanidad, es bastante dulce y atento, ayudando a sanar las heridas físicas y mentales de Delora, mientras aprende sobre límites, amor y un par de cosas humanas

    Luego tenemos a Mayumi. Ella viene de una larga línea de cazadores de demonios, así que es la primera mujer luchadora de toda la serie. De niña, Mayumi, con fiebre, salió a buscar a su gato perdido, encontrándose con Faunus en el bosque. En su delirio, Mayumi confundió al enorme Duskwalker con su gatito, lo que llevó a que este se prendara de ella. Siendo la primera humana que no le había tenido miedo y teniendo un buen nivel de inteligencia, Faunus decidió que la cuidaría desde lejos, cosa que se complica cuando ella crece y el cráneo de Faunus, la única debilidad de los Duskwalkers, casi es destruido por el rey demonio, Jabez. Con quizás poco tiempo en el mundo, él decide que quiere pasarlo junto a ella.

    En el cuarto libro, cambia por completo el universo. Trayendo consigo a Raewyn, una elfa ciega que, por culpa de un accidente, termina en la Tierra. Con el objetivo de encontrar magia para regresar a su planeta, se une en un viaje a Merikh, un Duskwalker que odia todo lo que se le atraviesa, pero que despierta un especial interés en la mujer. Siendo Merikh el más viejo de todos los Mavka, tiene mucho lore para darnos, entre eso, el verdadero objetivo de Jabez, que pasará a ser ligeramente importante en el resto de la serie.

    La siguiente protagonista es Emerie, también cazadora de demonios, quien se enfrenta a un problema ético cuando su gremio captura a un Duskwalker y empiezan a experimentar con él, sobre cómo funciona su cuerpo y las formas de matarlo. Siendo los Mavkas semi inmortales como son, Emerie tiene que ver cómo Ingram es abierto, cómo su corazón es extirpado, entre otros, y, sin embargo, nota que todavía puede razonar. Dándose cuenta de que estos seres quizás no son tan malos ni salvajes como en principio se creía, decide liberarlo y escapar con él.

    Para el siguiente libro nos encontramos en el más allá. Siguiendo a Aleron, un Duskwalker que fue asesinado por demonios, y a Gideon, el humano con el que decide crear su vínculo. Este libro es de los pocos que extiende el lore, destacando el planeta de los elfos y su implicación en la llegada de los demonios a la tierra, así como ampliando en los conocimientos que el lector tiene sobre los Mavka, que, al ser recolectores de almas e hijos de un semidios del vacío que es, a su vez, dios de la muerte en la tierra, pueden revivir. 

    Del séptimo libro ya les he hablado. Es bastante independiente de todos los demás, teniendo en cuenta que los protagonistas de este no saben ni están interesados en nada de lo que sucedió en los libros anteriores. Son una persona y un monstruo sanando sus traumas respectivos y aprendiendo a amar a través del camino. Lihn, la humana, que ha sido víctima de abuso sexual y Natahir, el Duskwalker, que ha perdido su voz debido a los errores del pasado.

    Finalmente, la serie cierra haciendo un arco de redención para Jabez, quien termina siendo emparejado con Zylah, hija de Magnar y Delora. Y, aunque los libros venían en caída desde el cuarto, es aquí donde finalmente el lector lo siente.

    Sí, como les dije, soy muy fan de estas historias. Por un lado, porque ya saben que me encanta la premisa del monstruo que es más sensible que el ser humano, que se esfuerza por comportarse bien en una sociedad que fue diseñada para rechazar sus instintos más básicos y sus necesidades más primarias. Que, a pesar de su exterior tenebroso, tiene un interior suave, respetuoso, dulce, pero que al mismo tiempo puede ser protector y bastante feroz a la hora de defender lo que considera que es suyo y aquello que ama. Por el otro, porque me encanta leer literatura basura. Eso es lo que hay aquí, una serie sin mucho sentido que se centra en emparejar personas de formas ridículas y nos lo creemos, porque en el fondo, por más escépticos que seamos, creemos en el amor, incluso si es un poco tabú, como resulta ser el caso de los monstruos.

    Yo de verdad estoy bien cuando no me ofrecen trama, sé a qué voy, lo disfruto y luego me embarcó en viajes más complejos (o no). El problema llega a mí cuando me empiezan a construir un lore, no paran de repetírmelo, y, sin embargo, este no tiene sentido ni acaba de tener una forma, así sea abstracta, en algún momento. 

    Los libros del uno al tres se disfrutan porque, bien que mal, tienen tramas simples, en donde el objeto es el ya mencionado romance cuestionable. Tienen personajes unidimensionales, pero que hacen bien su trabajo representando el tropo al que quieren evocar. Orpheus bien podría ser un jefe de la mafia, por su personalidad, Magnar un himbo y Faunus el chico tímido de la clase que resulta ser un dios sexual. Las chicas, sus complementos casi teatralmente opuestos. Donde Orpheus es aspereza, Reia es un sol; donde Faunus lucha por comunicarse, Mayumi se expresa por los dos. Una dinámica torpe, pero funcional. Y vaya que fue funcional en esas primeras entregas. 

    Entonces, a partir del cuarto, la autora decidió que el trauma bien que podría ser el elemento extra que acompañara a sus personajes. No es que los anteriores no hubieran tenido su propio equipaje, lidiando con la soledad, la depresión y la muerte en un mundo llevado por el carajo, pero paulatinamente en los libros posteriores, cual personaje tenía un pasado más trágico que el anterior. Y no empecemos a hablar de los Duskwalkers, experimentados, asesinados, torturados hasta el punto de arrancarles el corazón mientras todavía siguen vivos. Mención especial para Nathair, que tiene un TCA que se nos muestra, pero que la autora no se digna a tratar. Porque tenemos magia revive muertos, pero no psicólogos.

    Eso sí, todo se me hace mucho peor porque se supone que la autora tiene lectores de sensibilidad (que me parece a mí una tontería, pero será tema para otro momento). Y si estos lectores no pueden ver cómo el trauma tiende a no tratarse de la forma correcta, entonces qué están haciendo allí. Si me están colocando a personas equis a decirme con qué me puedo o no ofender, entonces que, por favor, hagan bien su trabajo. 

    La idea a partir de allí pareció ser seguir con las historias simples, pero añadiendo un poco de trama de un esquema mucho más grande aquí y allá. El problema fue que, al ser libros simples, con personajes tan estancados (porque los personajes humanos no tienen sueños ni ambiciones y el único propósito de los Duskwalkers con un poquito de cerebro como para pensar más allá del momento (a excepción de Merikh), es conseguir una novia), estos fragmentos de sentido se convirtieron en ambigüedad, en un montón de elementos inconexos que buscaron hueco en un mundo construido tarde y que, por tanto, dejaron un montón de vacíos que si bien la gente tiende a pasar por alto en la cronología de la publicación, son bastante más notorios cuando te lees más de la mitad de la serie en los primeros cuatro meses del año. Sí fui.

    Como les decía, en la cuarta entrega conocemos el mundo de los elfos, un lugar al que Merikh ha querido escapar desde que se enteró de él. Un mundo del que vienen los demonios que asediaron la tierra, pero que, a diferencia de nuestro planeta, tiene tres soles que están activos de forma permanente, ¿les había contado que los demonios no pueden tocar el sol porqué se desintegran de forma inmediata? Bueno, ante las debilidades, es normal que se adapten para andar en terrenos oscuros, como bosques, hasta que caiga la noche y puedan tener más libertad. Un razonamiento encantador, de seres que se supone que no razonan porque están abrumados por sus instintos primarios… Curioso como las razas denominadas “inteligentes”, han hecho todo lo contrario, pues tanto la sociedad élfica como la humana están en un constante declive, los humanos solo siendo salvados por su muy amplia tasa de natalidad.

    Yo soy fiel creyente que, para una situación que dura más de un par de décadas, las personas siempre vamos a adaptarnos y crear soluciones lógicas. Porque, además, es imposible que los demonios se hayan comido a todas las personas con neuronas en el mundo. Si un demonio tiene una debilidad tan obvia, como no poder tomar el sol a riesgo de muerte instantánea, ¿qué hay que hacer? (pregunta de selección múltiple) 

a. Llorar en el baño en espera de que nos coman. 

b. Vivir lejos de los enormes bosques ya contaminados y construir casas casi enteramente de vidrio, más un sótano con puerta de hierro.

c. Hacer pactos con los duskwalkers para que cada diez años vengan, se lleven a una mujer y pongan un círculo de protección contra demonios.

d. Crear gremios de asesinos de demonios donde la mayoría ni sabe usar armas.

    Quiero decir, incluso si el demonio se cuela en tu casa por la noche, al otro día moriría achicharrado. Una persona menos, pero también un demonio menos. Los refugios bajo tierra, siempre y cuando tengan puertas no hechas de madera, pueden ser bastante buenos también. Y, vamos, es una situación que lleva cinco siglos ocurriendo, no te dejas ir con la corriente, actúas. 

    Lo que me lleva al Velo… Los elfos, que retuvieron a los demonios en la tierra, también enviaron al semidios del vacío, Weldir, para, supuestamente, mantenerlos a raya. Sin embargo, la existencia del semidios en este plano es más un incordio que una ayuda para los seres humanos. Weldir es un domo de oscuridad, el lugar perfecto para que los demonios se escondan, crezcan, formen sociedades y se vuelvan muchísimo más fuertes. ¿Alguien más se da cuenta de que sin él habría más sol y, por ende, menos demonios? Quiero decir, imagina que hace este súper plan de cientos de años, esperando a que todos crezcan y ¡pum!, se desaparece. Demonios adultos quemaditos, amigos. Adiós amenaza. No digo que vayan a dejar de existir, pero eh, que una de sus guaridas más importantes desapareciera, con seguridad los menguaría un montón.

    Por algún motivo, este semidiós es castigado por los elfos. Se trata su envío a la tierra como parte de una pena en la que no le es permitido más que hacer su trabajo, como nos dice Raewyn en el cuarto libro. Ella misma hace declaraciones de que a los elfos no les va a gustar que “ese semidiós” haya conseguido una compañera y que esté procreando, haciéndolo sonar como que sus acciones deberán ser castigadas una vez llegue el momento. Pero cuando conocemos la diosa, madre de Weldir, en el sexto libro, a pesar de no parecer contrariada porque su hijo esté encargándose de los trapos sucios de los elfos, tampoco ve problema con que viva bien su vida, aceptando a Aleron como su nieto bastante fácil y cumpliendo las peticiones de su hijo con cariño. O sea que a los dioses poco les importa el comportamiento de Weldir y este, sin lugar a dudas, es más poderoso que cualquier elfo (que solo tienen en su haber que pueden vivir muchísimos más años que un ser humano común y que son súper altos), por lo que, no me queda claro por qué sienten superioridad moral o que pueden dictar lo que hace o deja de hacer una entidad que, en pocas palabras, los supera

    Ya que hablo de Weldir, vayamos a su dominio. El inframundo de la Tierra, pero solo para aquellas almas que entran en su territorio. De hecho, para esto existen sus hijos, los Duskwalkers. Resulta que, cuando los demonios comen humanos, sus almas quedan impregnadas en ellos. Cuando estos demonios son devorados por los Duskwalkers, esas almas se liberan, siempre y cuando estén dentro del velo (si no, ellos cargan con ellas hasta regresar), viajando a los dominios de Weldir, donde las pone en una especie de éxtasis en el que solo recuerdan sus mejores momentos en la Tierra. Si hay personas que se conocen, son puestas en el éxtasis juntas. De esto se nos habla ligeramente en el cuarto libro, ya que Merikh habla de su hermano más viejo y de cómo lo mató sin querer, cargando esa culpa por el resto de su vida. Pero solo sabemos el alcance de este mundo en los libros cinco y seis, cuando los dos Duskwalkers protagonistas y sus parejas, pasan cierto tiempo allí.

    Explorarlo hubiese estado genial, ya que permitía dinámicas distintas que se tocaron de forma ligera en ambos libros, como el que estas almas atrapadas allí, en Tenebris, solo pueden tener una lucidez real si son tocadas directamente por un Mavka o que cuando estos se comen alguna de estas almas, los peores momentos que ellas vivieron quedan incrustados en sus mentes, generándoles daño. O incluso que, de entre todos los escenarios, este inframundo es el único lugar que representa, al mismo tiempo, el mayor y menor peligro que pueden enfrentar los Duskwalkers, ya que no hay personas ni demonios que quieran hacerles daño, pero cualquier herida no tiene potencial de curarse al ser un reino que no cumple con los ciclos del día y la noche, indispensables en la curación sobrenatural de su especie.

    A pesar de que la muerte suena como algo tan absoluto, todo el tiempo se dan excusas sobre cómo la misma puede violarse. Tenemos un total de cinco personajes, desde el libro tres, con Faunus, que se enfrentan a su muerte y que, sin embargo, regresan a la vida. Esto fue impactante con el primero, quien tuvo la excusa más válida. Su novia pegó su cráneo, así que estaba mitad aquí, mitad allá. Siendo criaturas que representan al mismo tiempo la vida y la muerte, entiendo que sea natural para ellos, incluso si no es de forma consciente, caminar entre ambos mundos. Pero no es bajo esta premisa como se aborda en la historia, sino como milagros y dones concedidos por los dioses, lo que en la segunda muerte ya no coló tanto, que para el caso del libro seis, con Gideon y Aleron, ya no impactaba en absoluto y que para Nathair, protagonista del séptimo, ya nos valía un comino el estado, porque desdibujar de tal manera la línea entre la vida y la muerte solo generaba un desapego hacia el peligro que podían vivir los personajes, si es que existía el mismo. Total, siempre iban a estar bien.

    Este sentimiento de peligro del que hablo, también se diluyó bastante a partir del cuarto libro. Con Orpheus y Magnar, podíamos sentir cómo cada día podía ser una lucha, con los demonios presentes, con Jabez al acecho e incluso las mismas novias teniendo que enfrentarse a criaturas que querían acabar con ellas mientras su Duskwalker estaba perdido en sus instintos primarios, el peligro estaba por todas partes. Para Faunus fue ligeramente diferente, siendo Mayumi una cazadora de demonios experimentada, a pesar de que debía enfrentarse a ellos, y un par de veces a Faunus en su modo rabioso, sabía lidiarlos. En este caso en particular fueron los humanos quienes representaron una amenaza, demostrando la peor parte de la sociedad misógina y casi primitiva en la que se han convertido desde la llegada de los demonios. No fue lo más memorable, pero fue interesante ver esta cara de la moneda. Para el cuarto, Merikh era un dios del control por su humanidad avanzada. Para el quinto, Ingram era bastante manso y hubo pocos ataques de demonios a pesar de que Jabez había ordenado la destrucción de los Duskwalkers desde el tercero. En el sexto, Gideon le dio a Aleron su alma antes de que pudiera hacer cualquier cosa. En el séptimo, Nathair tenía un control excelente y, cuando no, simplemente se hundía bajo el agua. Para el octavo, cuando pensé que por fin iba a estallar todo el comer humanos, resultó que la Duskwalker tenía instintos contrarios a su especie…

    Una decepción terrible, les digo. Parte de querer leer esto, y sonará terrible, era ver muertes humanas y demoniacas. Esas eran mis expectativas en toda la saga. Gore y romance hasta el límite. Pero claro, al estar unidos con personas humanas, resultaba ser un hecho en común que aborrecieran esta naturaleza depredadora de los Duskwalkers, limitando con ello su consumo de carne. A pesar de odiar esta dinámica, la entendía. Por eso, cuando supe que en el octavo libro el interés amoroso del Duskwalker era Jabez, el rey demonio, frío, sanguinario, dispuesto a cualquier cosa por cumplir sus planes, esperaba la mayor matanza de personas en estos libros. Terminé encontrándome con Zylah, para cual matar un zancudo era el equivalente al genocidio.

    Lo peor de esto no es la Duskwalker negando continuamente su naturaleza, sino que el villano caricaturesco formado en los libros anteriores, ese que era malo por el simple placer de serlo y porque, aparentemente, estaba en su naturaleza, obtiene una redención. Y una muy mala, si debo decirlo. 

    Aquí fue cuando me senté a cuestionarme mi vida. Antes habían sido libros muy malos que disfrutaba más o menos leyendo, dependiendo de la historia. Pero, a partir de aquí, tuve que detenerme a pensar dónde había degenerado esto que yo disfrutaba. Y, como ven, degeneró bastante pronto, pero esto fue la gota que colmó el vaso. 

    No solo porque Zylah es una Duskwalker de tan solo dos años máximo. Aunque estos seres son tan viejos como la cantidad de humanidad que ganan, Zylah es, en esencia, una bebé, pues se comporta como tal. A lo largo de la serie hubo otros Mavka con poco desarrollo y que tenían un asombro por el mundo infantil, sin embargo, es diferente saber que han vivido por ciertos años, ganando humanidad y fuerza de a poco, conociendo a sus novias cuando la mayoría de esa humanidad ya ha sido desarrollada. En el caso de Jabez y Zylah, este la conoce cuando no sabe nada en absoluto, la cría, alimentándola y enseñándole del mundo, solo para enamorarse de ella y aceptar ser su compañero, cuando ella ha estado completamente privada de cualquier otro contacto. Bueno, eso iría mucho con su estética villana… Si no se hubiese intentado romantizar.

    La personalidad de Jabez pretende dar un giro de 180°, justificando todas sus acciones pasadas con el discurso de ser un alma incomprendida. Por un lado, se nos aclara que, a pesar de ser un genocida, tiene una debilidad por los niños, por lo que nunca podría lastimar a un ser inocente. Pero ahí lo tenemos en el segundo libro, cuando Zylah era una bebé, amenazando a sus padres con hacerle daño. Se intenta traer a la mesa que lo decía solo para molestar a Magnar y Delora, pero tú y yo sabemos que lo intentó, solo que los Duskwalkers en su estado más pequeño son indestructibles al no tener formado un cráneo.

    Nos pintan a Jabez como un personaje justo, a su manera, rechazado por su sociedad. Al ser mitad elfo mitad demonio, es encerrado hasta que logra escapar, llevándose con él a un montón de demonios a través de un portal hacia la Tierra. Allí, se instala como su rey, creando una sociedad donde viven libremente una vez alcanzan la humanidad suficiente, estableciendo normas de convivencia y comportamiento que tienen poco que ver con lo que se esperaría de un demonio, pero sin llegar a negar del todo su naturaleza. De esta forma, Jabez conforma un ejército que, llegado el momento, viajará a la tierra de los elfos para acabar con ellos, ignorando, de nuevo, que el lugar tiene tres soles. Quiero verlos. Entonces, su causa es en realidad justa. Tiene motivos buenos, solo métodos y metas bastante cuestionables, pero yo lo entiendo. Seamos sinceros, los elfos son la peor raza que nos presenta la autora y su extinción masiva hubiese sido gloriosa. 

    El problema es que, darle motivaciones justas, no solo hace que niegue lo que ha sido en el pasado, sino que la solución del conflicto que se plantea en esta historia sea asquerosa. Aquí íbamos a ver cómo Jabez triunfaba o fracasaba, pero se rindió. Por amor. Una trama que viene gestando hace cinco siglos, se termina en dos horas porque Zylah se lastima y él no puede vivir en un mundo que no sea de color rosa para ella, aunque la conoce hace dos meses… O sea, todas las relaciones en esta serie se desarrollan demasiado rápido para cualquier tipo de gusto, pero al menos la excusa está en que las novias son la finalidad de los Duskwalkers. En este caso, la meta de Jabez era destruir a los elfos, dándole un futuro más prometedor a los demonios, o morir en el proceso. Al final, ni lo uno ni lo otro.

    Todos estos libros sufren de contar más que mostrar. Teniendo en cuenta que son historias que superan las cuatrocientas páginas, siendo el último de más de ochocientas, una esperaría que cuando menos, tuvieran mucho para decir, pero no. Más de la mitad de esas páginas es introspección de los personajes, pero no es un viaje mental que genere caminos, discusiones con ellos mismos o cuestionamientos sobre lo que hacen o hacen los demás, sino un constante ir y venir sobre las mismas ideas, encontrando soluciones, retractándose de esas soluciones y volviendo a la misma conclusión una y otra vez, por lo que llega un punto en el que es bastante cansino.

    En contra de todo pronóstico, las escenas sexuales, también tienen el mismo problema. Para empezar, son bastante innecesarias y, fuera de los primeros dos libros, se sienten bastante anticlimáticas, suceden en momentos que nada que ver y tan rápido que los personajes con dificultad tienen un par de días de conocerse. Además de eso, son demasiadas y no aportan en absoluto al desarrollo de la historia. Cuando la autora podría estar creando relaciones románticas creíbles, mejor utiliza ese tiempo escribiendo sexo. Eso sí, la anatomía del miembro de los Duskwalkers tiene muchísimo más desarrollo que la pseudo trama que intentó crear Reyne a último momento.

    Al finalizar el octavo libro la autora nos dice que no es el final de la serie, van a existir más libros sobre los Duskwalkers, viviendo en un mundo que ya no es tan peligroso para ellos, al no existir Jabez como amenaza inminente. Como dije, a mí me gustan estas historias y visto que la autora escribió ocho libros sobre estos seres en un periodo de dos años, a ella también, pero supongo que sacar libros de la misma franquicia varias veces al año tuvo que terminar por quemarla, lo que se evidencia en la increíble baja de calidad que tuvo su historia a medida que iban saliendo los diferentes tomos. Considero que es bueno que quiera tomarse ese descanso, refrescarse y luego volver con historias mejor pensadas y una construcción de mundo un poco más sólida (que tampoco se necesita una locura). Habiendo abierto el camino para la existencia de un montón de razas, habitantes de otros planetas, con habilidades aún no exploradas, tendrá bastante contenido para hacer, no solo las historias de la Tierra, que son mis favoritas, sino también explorar esos horizontes que marcó y que podrían ser bastante interesantes en el futuro.


A soul to keep: ★★★★☆
A soul to heal: ★★☆☆☆
A soul to touch: ★★★★☆
A soul to guide: ★★☆☆☆
A soul to revive: ★★★★☆
A soul to steal: ★★★☆☆
A soul to protect: ★★★☆☆
A soul to embrace: ★★☆☆☆

Encuéntrame:

20 julio 2024

WED TO THE LICH, POR LAYLA FAE

Wed to the Lich
Layla Fae
2023 
Romance | Fantasía
ARRANGED MONSTER MATES
1. Wed to the ice giant | 2. Wed to the minotaur | 3. Wed to the wolfman | 4. Wed to the phoenix | 5. Wed to the dragon | 6. Wed to the orc | 7. Wed to the lionman | 8. Wed to the lich | 9. Wed to the bullman | 10. Wed to Jack Frost | 11. Wed to the dark elf | 12. Wed to Krampus | 13. Wed to the gargoyle | 14. Wed to the grendel | 15. Wed to the basilisk | 16. Wed to the lynx

Liches are almost gone, only a handful of us left. I must marry to keep my race from extinction, yet how? No living female will ever stoop so low as to marry a lich. People fear us. They say we are the harbingers of death, bad luck, rot and decomposition. In one last bid to carry out my duty, I requested a wife through the Temple. She turns to be a neglected, sickly thing with trembling hands and downcast eyes, seeking an arranged marriage out of despair. And she's perfect. Her blushes burn hot, her voice rings with feeling, and her kisses taste like summer. She is life personified, all warmth, light, and sweetness, and I crave her like darkness craves the sun. But will she sacrifice her warm, beating heart to a creature of death like me?
MI OPINIÓN
    Los protagonistas masculinos con cara de calavera son lo mío desde que empecé a leer la saga de los duskwalkers, ja, ja, ja.
Este libro contiene los siguientes posibles triggers: Desórdenes alimenticios, Dismorfia corporal, Abuso verbal por un cuidador, Muerte de animales

Comencé esto sin saber qué demonios era un lich. Pensaba que era algo así como la muerte misma y, aunque en el libro en realidad no estoy tan desencaminada de mi concepción inicial, resulta que hay toda una cultura creada alrededor de esta criatura que viene, al parecer, desde los relatos de Lovecraft. Y si hay algo que me decepciona de esta historia, es que no se profundizara en ellos en absoluto.
    Quiero decir, mi veloz búsqueda en Google me reveló que los liches son magos poderosos que se transforman a sí mismos en muertos vivientes en el afán de ganar poder (aparentemente, entre más muertos, podridos, cadavéricos, más poderosos resultan ser). Mi cara honesta al leer sobre liches: 


    Pero, como dije, en esta historia no sabemos en absoluto nada del trasfondo del prota. Él existía antes de que los mundos convergieran (o lo que sea que haya sucedido. Ya saben, empezar desde un octavo libro termina en este tipo de confusiones), siguió existiendo y luego consiguió una novia humana y continuó existiendo. No sabemos nada. NADA. De él. 
    Siento que es tonto, es potencial desaprovechado. Cuando tienes un ser con tantas posibilidades, pero para lo único que lo utilizas es para tener sexo con la prota humana de maneras creativas, pues... Adiós personaje interesante. ¿Te queda un novio literario lindo? Sí. ¿Es memorable? No. Porque hay muchos chicos/monstruos de libros que son un amor con sus parejas, así que no me estás ofreciendo nada nuevo. 
    La historia trata de un matrimonios arreglado entre el lich, que buscaba esposa, Virgil, y la humana indefensa que no tenía nada para decir a su favor, May. No entiendo muy bien cómo funciona esto del matrimonio arreglado, precisamente por empezar tan avanzada en la serie. Pero es que, si me vendes una historia como que "se puede leer por su cuenta", pues lo mínimo que esperaría es lograr entender todo lo que pasa. ¿Hay como una app donde los monstruos hacen un test para que los casen? ¿Les hacen una adivinación en el Templo? ¿Un bañito con hojas de ruda, quizás? Porque no me quedó claro cómo los matcheaban y por qué, al ser elegidos eran lo equivalente a una pareja destinada. Dos líneas te tomaban explicarme eso. 
    Virgil le causa traumas a todos tan solo con verlo. Es como si vivieran sus peores terrores a través de sus ojos, pero cuando conoce a May (en un cuarto oscuro, en el que es como una prisionera), por motivos que se salen de nuestra comprensión y que nunca se abordan en la historia, ella no está aterrorizada de él como los demás. Cuando ella ve a los ojos de Virgil solo siente calor y curiosidad, porque a Virgil le cambia el color de los ojos dependiendo de su emoción (déjenme agregar que me encanta este micro tropo)
"I've never kissed anybody" he whispered, and his eyes dimmed again, the orange turning into a deep, smoke-tinged red.
    Yo interpreto que medio se intenta esconder su falta de reacción como una consecuencia de que su vida ya de por sí haya sido un desastre y que Virgil es, de hecho, su bote salvavidas. Ella quiere que él esté completamente apegado a ella con tal de que la saque de la especie de orfanato en la que vive.
This was my husband. My new life. My future. I would kiss hum and give him whatever he desired, because I never wanted him to stop needing things from me. Needing me.
    Y ni siquiera la puedo culpar del todo. La tenían traumatizada. Para empezar, el orfanato funcionaba más como una casa de trata de humanos, donde los monstruos podían ir a ver bailar a las chicas y decidir que querían acostarse con cualquiera de ellas, que hasta donde entiendo (porque tampoco se trató con mucha profundidad) no podían negarse a ir con ellos. Por el otro lado, su cuidadora era una loca y le causó un desorden alimenticio, pues para ella todas las chicas siempre estaban gordas y estar a punto de morir era la única forma de lucir bella. Si no cumplían con estos estándares suyos, las chicas carecían de valor para los demás y no podían dedicarse al baile. Para May, a quien bailar le encantaba, no comer se convirtió en la única forma de obtener consuelo. 
    Por supuesto, una vez casada con Virgil, él trata de alimentarla correctamente y mimarla. En este blog amamos a los monstruos


    Pero, entre que no entiende del todo a los humanos y que él mismo tiene problemas con comer frente a otros, pues le da vergüenza que su novia pueda encontrar el acto horrible y ya no lo quiera más, no se hace ni un paso completo. Al menos, el intenta hablar del tema con ella, lo que se agradece, pues a falta de psicólogo, por lo menos alguien escucha a la pobre prota.
"I am ashamed because I want this cookie, but I'm afraid if I have one, I will want more"
    Sin embargo, como todos los demás temas de esta historia, al final no se explora demasiado. Lo que sí me parece una pena, pues cuando se están tocando temas tan delicados, se espera un mejor trato de los mismos.
    La historia se centra tanto en querer avanzar y tener sexo que se olvida de la construcción del romance, de las relaciones, de mostrarnos cómo conviven los dos hasta el punto de que se pueden sentir atraídos de forma genuina el uno por el otro. Decirlo no es lo mismo que mostrarlo, así que solo debo creer que May está enamorada del monstruo que la sacó de su infierno por medios cuestionables... Y yo no lo hago. Quiero decir, que desarrolle síndrome de estocolmo no es tan descabellado.
    Voy a fingir que no existen los dos epílogos. Están tan mal narrados que incluso me dolió. Además, salen nombres de personajes que nunca aparecieron a lo largo de la historia y no sé si la autora quiere que yo adivine quiénes son, porque ni siquiera dijo sus pales. Por ejemplo, nombran a una Agnes para cuidar a un bebé recién nacido. No tengo ni idea si Agnes es la hermana mayor, una sirvienta, una humana, un monstruo... Agnes existe, similar a Virgil. No hay más de ninguno de los dos.
    Para ser sincera, la historia no me disgustó del todo. La disfruté bastante, que es el porqué de la nota que le estoy dando. Pero sí me faltó. De todo un poco. Desarrollo de personajes, construcción del mundo, diálogos que se sintieran realistas y coherentes con las personalidades que se les había dado a los personajes. Sobretodo, me faltó que los temas difíciles fueran tratados con el respeto que merecían, que no fueran sanados por obra del amor, pero por un trabajo consciente al rededor del trauma. Incluso, allí sí que te acepto una elipsis, que me lo dijeran, cuando menos.
    No está mal, no está bien. Es un libro de romance normalito. No les va a cambiar la vida, pero tampoco creo que se las haga peor.

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19 febrero 2023

My Alien Prince, por Reverie Harwood

 My Alien Prince
Reverie Harwood
2023
Romance | Fantasía
Rotha Mates of Xavia
1. My Alien Prince | 2. ¿?

Hunky green aliens aren’t what I signed up for…entirely. After my fiancé left, I impulsively joined my sister on a spaceship for an Earth-sponsored trip to Xavia, a friendly, tropical planet with handsome, alien men. Getting paid to vacation—was too good to be true. I woke up from stasis to find we’ve been dropped off to serve as wombs for the dying Xavian race. The Xavians are just as surprised as we are and treat us with respect, despite their population crisis. Another alien race has decimated their kind, and almost all their women. Until Earth returns for their payment, I’m hosted by the Xavian Prince, Drex. As promised, he’s devastatingly hunky, but I’m not jumping into a relationship as quickly as I jumped onto that ship. I’ve learned my lesson, no matter how the sparks start to fly. Bursting with sexy aliens, steamy fantasy, and smart charm, Rotha Mates of Xavia is a galaxy of dreamy romance and fated happy endings. Dive in.
MI OPINIÓN
📢Contiene spoilers📢
 
¿Solicité un ARC de un tipo azul con músculos solo porque me quería unir a la ola de personas leyendo sobre extraterrestres sexys y encantadores? Sí. ¿Me arrepiento? También. 

No sé qué tipo de expectativa tenía, pero intenté mantenerla baja. Sé que este tipo de historias no es para todo el mundo. Hay quienes las disfrutarán más y quienes la disfrutarán menos exactamente por las mismas razones que al grupo 1 le encantó, el problema es que fui del segundo grupo. 

La obra va sobre Katy, a quien su prometido, del que no volvemos a saber absolutamente nada, la deja plantada el día de su boda. Con una deuda gigante, gracias a los costos del evento, y el corazón roto, Katy se deja convencer por su hermana para hacer un intercambio cultural aprobado y pagado por el gobierno a un nuevo planeta en alguna parte de la galaxia. 

El problema comienza cuando, al despertar en la nave espacial, un vídeo del gobierno les revela que en realidad están siendo enviadas allí con la esperanza de que puedan acoplarse con los hombres de ese lugar y ayudarlos a repoblar la especie, que está al borde del colapso. Esto, porque el planeta genera cierto material necesario para el funcionamiento de los aparatos electrónicos de la tierra. Obviamente, las chicas en la nave están en contra de esto, pero cuando los enemigos, los Orkain, atacan, deben separarse rápidamente para resguardarse, dando la casualidad de que Katy termina siendo rescatada por Drex, el príncipe de dicho planeta, por el que su cuerpo reacciona en contra de su voluntad. 

Bien, no una premisa mala. Un poco cliché, sí, pero con potencial. Como todo, vamos. 

No sé ni por dónde empezar a quejarme, dios. Voy a hacer una lista y ya. 


1. Venta de terrícolas. 

Está bien que el gobierno quisiera hacer este tipo de intercambio potencial: enviar mujeres a cambio de recursos (no, no está bien, pero vamos a fingir que tiene sentido. El pacto ficcional y esas cosas). PERO tenía que ser algo consensual. Estas chicas han sido metidas en estas naves con propuestas falsas y obviamente no van a estar dispuestas a ser la salvación de una raza cuando no es para eso para lo que se han apuntado.

¿Qué le costaba al gobierno decir para qué necesitaba a las chicas? Quiero decir, voluntarios sobran cuando los puntos están sobre las ies. Y puedo imaginarme a más de una persona decidir embarcarse en este viaje solo por la posibilidad de, por fin, conocer una persona que le complemente y sea el amor de su vida. 


2. Blancos *rueda los ojos* 

A este programa puede entrar literalmente cualquier mujer joven. Quiero decir, no se dicen grandes cosas sobre los requisitos para hacer parte, pero no son muy grandes, dado que la misma prota anuncia que aceptan a cualquiera. 

Esto significa que personas que no hablan inglés deberían estar siendo aceptadas. 

Así, tenemos que los extraterrestres aprenden a hablar nuestro idioma para hacer sentir a las mujeres recibidas, pero solo aprenden inglés, como si fuera el único idioma en la tierra. 

Está bien, finjamos que, como es el futuro, el inglés se hizo el lenguaje universal, como REALMENTE. Sin embargo, todavía son estas mujeres las que están visitando otro planeta y las que deberían estar aprendiendo cómo comunicarse de manera adecuada allí. Es como si yo me fuera para Corea y esperara que me hablaran español allá. Una total tontería. Claramente no estaba pensando que inventaran un idioma completo para un libro de romance, pero me pudieron decir que estaban hablando en la lengua del planeta y que había dificultad para comunicarse por lo mismo. Pero no, los extraterrestres son bastante competentes en los idiomas y ya sabemos cuál será el nuevo idioma del planeta… 


3. La prota. 

Es insufrible. 

Agarren: acaba de llegar a un nuevo planeta, del cual no sabe nada y que está siendo atacado por extraterrestres (otros), su reacción es alejarse de los nativos, que saben cómo lidiar con las cosas, y pensar que puede enfrentarse a los malos. Resultado: se desmaya. 

Tienen que cargarla, medio arrastrarla, lo cual le produce asco, porque ella es una persona super capaz, pero al mismo tiempo la pone caliente, porque ML está guapo. 

Llegan a la casa de ML, le muestran que su hermana está bien. Se emperra porque quiere ir a verla en persona, aunque le dicen que es imposible dado que los malos están todavía afuera y necesitan esperar un poco hasta que se vayan. Por supuesto, ella no va a aceptar eso y va a huir de la casa, para encontrar a su hermana, cuando no conoce el planeta ni el camino, ni dónde está ella. Termina por encontrarse uno de los extraterrestres malos de frente y quedarse paralizada como la tonta que es, solo para que el ML tenga que ir a salvarla y ella vuelva a babear porque está musculoso. 

Pasa el tiempo entre ella siendo una grosera y ML intentando complacerla. Se entera de que en esta raza alienígena existen los mates y decide que, aunque no puede y no quiere ser el mate del príncipe, va a disfrutarlo; momento en que nos enteramos que el vato tiene tres lenguas. Lo que encuentro relevante por propósitos de estudio, evidentemente. Él la complace, ella a él no. Un par de veces, al menos. 

Se apega al vato, el vato se apega a ella. Él sutilmente le habla más de los mates, porque ya todos sabemos cómo terminará esto. Pero ella decide que tiene que alejarse de él, porque volverá a su planeta y no puede ser su pareja destinada. Así que intercambian su estadía con otras personas, yéndose Katy con un oficial a quien no se digna ni a mirar. Lo trata re mal la morra.

Cinco minutos alejada del ML y decide que al final sí que quiere estar con él, convertirse en reina y tener a sus bebés. Palabras suyas, no mías. Así que se vuelve a escapar. Ajá, en un planeta donde no conoce los caminos ni dónde vive el vato. Lo que ajá, la lleva de nuevo a encontrarse con el alien malo y a que Drex la salve, como buena damisela en apuros que es. 

Si algo debemos darle gracias a Katy es que, dada su tendencia a hacer estupideces, por fin se encontró la forma de matar a estos aliens, lo que antes era desconocido. 

Lo peor es que ella suelta frases del tipo: “Bien, por fin hay alguien con sentido común aquí”. Como si los extraterrestres, que aprendieron inglés en un año, mientras ella iba al planeta esperando comunicarse por osmosis o algo así, fueran unos tontos y ella fuera una persona super coherente y sus decisiones fueran las mejores. 


4. ML. 

Es una contradicción que camina. 

Es el príncipe menos principesco que existe. Se disculpa con todo el mundo, no tiene autoridad para nada. No entiendo qué hace como trabajo. Al parecer algo que podía hacer en su casa y que cuando Katy llegó decidió hacer en otra parte para no incomodarla más con su presencia, creo. 

Sobre Katy dice: “no voy a exigirle nada, porque es su propia persona”, para tres doritos después decirle que no puede ir a trabajar porque eso lo haría quedar mal ante los demás aliens, porque Katy es básicamente el mate del príncipe y no debería. A pesar de que es lo que ella quiere. 


5. Romance. 

No tiene pies ni cabeza. 

Un momento Katy está diciendo que ni se le va a acercar porque las metieron ahí en contra de su voluntad y al segundo le está metiendo la lengua en la garganta porque tiene tres y eso es muy caliente ¿? 

Luego, realmente hay frases del tipo “exploró mis papilas gustativas”, que son muy raras para una narración. Dios, no es caliente, daban un poco de pena ajena y sacaban del momento spicy, porque quién se puede tomar en serio eso


6. Diálogos. 

Super forzados. 

Ejemplo: 
“Quién iba a creer que íbamos a venir a este planeta, íbamos a encontrar a los amores de nuestras vidas e íbamos a estar embarazadas de ellos? Yo no” 
 “Yo tampoco” 
Díganme qué hermanas hablan así y me disculpo. 

Yo no quiero saber sobre la vida sexual de la mía y cerrada de mente no es que sea. Pero tengo mis límites sobre la familia.


Mi conclusión es que no lean libros solo porque tienen vatos azules con músculos en la portada

Me niego a volver a leer aliens azules solo porque andan de moda.

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