Autor: Beth Fantaskey.
Año de Publicación: 2010.
Género: Juvenil - Paranormal - Romance.
Primer libro de la duología que lleva el mismo nombre.
Los No-muertos realmente pueden fastidiar tu último año de secundaria...
Casarse con un vampiro definitivamente no se ajusta a los planes de Jessica Packwood para "buscarse una vida" al terminar el instituto. Pero entonces hace aparición un extraño (e increíblemente guapo) estudiante de intercambio llamado Lucius Vladescu, afirmando que Jessica es una princesa vampírica rumana de nacimiento y es además, su prometida perdida. Armada de mucho valor y una copia de Crecer Estando Muerto: La Guía Para Vampiros Adolescentes, Citas, Sentimientos, Emociones, Salud y Vida, Jessica hace una dramática transición de estudiante promedio a glamorosa princesa vampírica europea. Pero cuando un cazador hortera pone sus ojos en Lucius, Jess se encontrara luchando por recuperar a su príncipe rebelde, por salvar su alma de la destrucción eterna y por evitar la guerra mundial entre clanes vampiros que se desatará si no cumple su destino de casarse con él.
Esta es la segunda vez que me propongo leerme este libro y la primera en la que lo acabo, y quiero aclarar que la primera vez no lo termine debido a que me castigaron y no pude seguir leyéndolo, aunque debo admitir que la primera vez que lo empece me gusto más, tal vez porque era más pequeña o porque en su momento no era tan común ver vampiros buenos en todas partes. Pero no me malinterpreten, la historia si me gusto. Esta llena de tópicos, pero por alguna razón estos son de mi agrado.
Primero hay que hablar de Jessica, o como yo prefiero llamarla, Antanasia; ella es una chica común y corriente la mayor parte de la historia, es enamoradiza, débil e indecisa, le cuesta aceptar las cosas que no han sido comprobadas científicamente y ama las matemáticas. Antanasia es el personaje que más evoluciona en toda la historia, aprende a afrontar las situaciones con madurez y a aceptar (por así decirlo) su destino.